21 septiembre 2023

Conectarnos, enredarnos, entretejernos... EVE

 En estas semanas, Espacio R Tramas se colmó. Se colmó de gente, de gente valiosa y querida, se llenó de actividades y haceres... no sólo físicamente sino emocionalmente y espiritualmente.

Para que después, más adelante, pueda ir contando lo que pasó y compartiendo el material generado, se me ocurre reflexionar sobre algunas palabras o ideas que aparecen a la hora de pensar cómo se vincula la humanidad hoy.


Con toda la invasión tecnológica e informática, el verbo "conectar" entró en nuestras vidas de una forma nueva y hoy, es parte de nuestros discursos cotidianos.   

Según la Real Academia Española es: "unir o poner en comunicación dos cosas o dos personas, o una con otra." Pero, a mí me resuena más como: establecer una conexión casi mecánica como la de un enchufe en un toma corriente. ¿Cuántas veces nos dijimos con otros: "nos conectamos" o "estamos en contacto"? ¿Qué profundidad tiene esa conexión? ¿Cuántas veces fue sólo una frase conveniente para postergar un encuentro? La pandemia ha dejado muchos aprendizajes, nos ha permitido conocer y encontrar muchas posibilidades tecnológicas para encontrarnos sin necesidad de hacerlo presencial y directamente. Pero, ¿cuántos de esos descubrimientos hoy usamos bien? 

No siempre cuando nos conectamos, conectamos con la mirada profunda, con el ser del otro, no siempre dejamos ver nuestro ser ni lo entregamos. Para que ese vínculo sea profundo, también deberíamos conectar las esencias, aunque sea en encuentros por motivos profesionales, laborales o protocolares. La conexión no debe ser "inestable" o "débil" como la de la red de Internet, tenemos que tener una banda ancha, con mucha capacidad... de escucha, de mirada, de expresión para que el "conectarnos" nos permita "resiliar".

En cambio, con "enredarnos" es distinto. Esta foto grafica claramente la idea qué quiero explicar. Cuando nos "enredamos" estamos en contacto, de varias maneras, desordenada e intensamente, nos tocamos, nos movemos y nos cruzamos, nos empujamos, nos sostenemos, nos mezclamos. Somos distintos, pero nos revolvemos en un mismo escenario. A veces, es un juego necesario y vital, pero a veces, es un caos que no colabora con los procesos deseados para lograr objetivos comunes. 

Es diferente "enredarse" para hacer "red", que para hacer "enredos". Hacer red, implica cierto orden, cierta matriz de relación que debemos respetar, establecer contactos puntuales, regulares, equidistantes, ordenados.


En una red, todos nos tocamos, nos sostenemos, nos entrecruzamos, pero con espacios, con vacíos equidistantes, organizados para un fin. La red sabe para qué vive, debe saber por qué y para qué existe. En cambio, en el "enredo" no.

Continuando con las diferencias, cuando nos entretejemos, nos conectamos, para formar un tejido más cerrado, con menos vacíos, con muchos menos espacios.  


El entretejido es un vínculo artesanal, manual, que implica el intelecto, las emociones, el alma y también el cuerpo. Cuando nos entretejemos todo se produce con una meta a alcanzar, con un fin importante: el tejido tiene una función, tiene un diseño específico y además esa prenda tendrá un destinatario, ya definido o por determinar. Cada punto es importante, se tuerce, y se retuerce por algo y para algo. Se cruza con otros, se entrecruza con otros que están al lado o abajo y a la vez luego, sostiene a otros que vienen, se deja enlazar, permite que otros se enlacen con él. 

También podríamos hablar de trama, quizás sea un entretejido especial, no tan manual, no tan espontáneo... un entretejido realizado con otros dispositivos o herramientas. Una metáfora de esos dispositivos sociales puede ser el telar, él acomoda las hebras, las saca de su enredo, las ordena, las acomoda como urdimbre, para que luego por ella pase los hilos de la trama con un ordenamiento y diseño bien determinado, con otras herramientas intervinientes.


























Un entretejido vincular ecosistémico (EVE) promueve y sostiene la co-construcción de #ResilienciaEcosistémica. Cómo lo hace y cómo es este entretejido, es el desafío en el que actualmente estamos trabajando, por el cual hemos iniciado un proyecto de investigación acción, del cual daré los avances próximamente. En ese proceso de trabajo en Espacio R Tramas hemos recibido visitas importantes con las cuáles hemos conversado y trabajado mucho. 

Ya les iré contando... mientras tanto, reflexionemos si con los demás nos conectamos, nos enredamos o nos entretejemos. ¿Qué nos pasa en cada caso? ¿Qué nos pasa cuando no nos vinculamos? ¿Qué pasa cuando se nos desteje el tejido? ¿Qué sentimos cuando los puntos del tejido vincular se nos escapan? ¿Y si se nos acaba la lana? ¿Qué pasa cuando una tijera corta nuestros puntos?

Pensemos en todas esas metáforas de esas situaciones tan habituales en nuestros procesos vinculares...
  

  


    


12 julio 2023

Favaloro y la resiliencia.


(Entrada publicada en noviembre del 2013)

Pensar en René Favaloro es pensar en un modelo, en un ejemplo, en un personalidad destacada que se hizo y que es parte del ideal argentino, que dispara la admiración pero que sobre todo pone a prueba la capacidad crítica de los argentinos. Es un nombre que acerca a lo mejor y a lo peor de la "argentinidad", por lo que aportó y por lo que enfrentó.

(Texto agregado diez años después en 2023: 
Favaloro: ¿co-construyó Resiliencia Ecosistémica? ¿es un ejemplo de ella? ¿qué nos aportó a nuestra resiliencia? ¿co-construimos Resiliencia Ecosistémica desde su historia? ¿logramos promover pensamiento crítico desde su vida y su historia? ¿nos genera pertenencia sociocultural o es sólo un nombre recordado y mezclado con otros como símbolo argentino? ¿une o desune? 
Hoy, las redes se inundan de su cara y de publicaciones sobre su vida. Hoy casi todo sigue igual.)

En tiempos movidos, tomarse un tiempo para tener en cuenta algunas historias que hacen a nuestra pertenencia, que encarnan valores comunes y que son símbolo de nuestra cultura, es sumamente positivo en pos de generar resiliencia y enfrentar las dificultades que la realidad nos presenta, tan impregnadas de enfrentamientos, falta de tolerancia y respeto. Un oasis para poder pensar con más tranquilidad y aceptación en nuestra capacidad de resiliencia.

03 julio 2023

Hacer con sentido y con conciencia: #haceresresilientes

Parece una frase muy usada: el ser se manifiesta en el hacer. A veces, se utilizan las ideas demasiado, pero no por eso tienen menos importancia o trascendencia.

La esencia de las personas, sus características, sus valores, sus ideas, sus pensamientos, sus sentimientos y emociones, sus pasiones y sus miedos, sus esperanzas y sus sueños, sus recuerdos y su historia, sus olvidos y su memoria, su presente y su futuro... todo lo que es, se manifiesta en su hacer y en sus obras. Ellas quedan impregnadas de todo. En cada paso de esa actividad, de ese trabajo, de ese hacer, se ponen su impronta: sus ritmos y sus tiempos se acompasan, se aúnan, se integran y se sintetizan, se materializan. 

Cuando otra persona toca, usa, disfruta o admira esa obra, ya sea de arte o cualquier producto humano hecho con las manos, puede sentir y compartir ese contenido... puede unirse al creador, sentirse parte de él y de su existencia, así trascienden todos. Así se logran vínculos personales valiosos. Aunque sutiles, son imprescindibles para conectarse con la vida y encontrar sentidos comunes a la existencia.

Para Viktor Frankl encontrar el sentido de la vida es la necesidad fundamental del ser humano, por lo cual aparece como esencial en el proceso de crecimiento, integración y realización de una persona. La búsqueda de sentido a la propia existencia y su encuentro, le permitirán orientar sus acciones con sus principios y realizarlo (hacerlo real) responsablemente. Con lo cual, es en el campo concreto del hacer dónde se sentirá la plenitud de la misión cumplida. Se trasciende espiritualmente desde ese hacer particular con sentido. 

Por lo tanto, si nos preguntamos qué hacemos, por qué lo hacemos, con qué sentido lo hacemos y encontramos respuestas consistentes que nos dejan satisfechos, hemos encontrado el sentido de nuestra vida y más allá de los resultados obtenidos, podremos sentirnos plenamente y contemplar nuestras obras con la satisfacción de que nos sintetizarán: a nosotros mismos, a nuestro sentido de vida y a nuestras características esenciales. Podremos ver todo eso reflejado en ellas, y los demás también. Mucho más aún, podrá vivenciar y sentir en los obras concretas aquellos que la utilicen y vivan directamente, desde un consumo y uso consciente y atento a estos contenidos sutiles que traen los haceres de la humanidad. 

Si a todo esto le sumamos el empleo responsable de insumos y materiales, la importancia es aún mayor. Al sumarle al contenido espiritual y existencial de los productos, el que se incluyan principios ecológicos y medioambientales, esa vivencia se completa con el aspecto natural. Si la materia prima de un objeto, tiene elementos naturales cuidados con respeto y/o reciclados o reutilizados para no malgastar recursos naturales, el sentido final de ese consumo es superior. 

Entonces, las obras, los productos, las manufacturas y todas las resultantes de los haceres humanos, desde la #ResilienciaEcosistémica, tienen un doble valor en sí mismos: ser el fruto concreto del sentido de la vida del que lo hizo y ser la ocasión de la búsqueda del sentido a la existencia del que lo usa y disfruta, desde la conciencia y la vivencia de lo que significa para el autor, creador o productor. Así las acciones y las actividades humanas son #haceres resilientes, ya que promueven #resiliencia en ambos protagonistas.

Por eso, Espacio R se complace en que, desde hace más de un año, se haya sumado a su quehacer profesional, intelectual, académico, formativo, de orientación y de consultoría, la producción de #tramas resilientes: prendas tejidas con las manos, con técnicas ancestrales y materiales nobles (hilados naturales, agroecológicos, reciclados), ideadas y creadas con un sentido. Estas tramas permiten constituir "entretejidos vinculares ecosistémicos" a través de su adquisición y entrega. El intercambio de elementos deseados, pensados, diseñados, creados y producidos con este espíritu enriquece el trabajo y le quita el peso negativo de ser una carga, un castigo o algo no deseado, sino una oportunidad de manifestar el ser y compartir sentidos y valores en redes resilientes, que nos vinculan en el marco de una mirada y un paradigma ecosistémico: donde ser "personas" implica ser la "humanidad plena en la Naturaleza".




 

05 junio 2023

Entretejerse: ser y hacer desde la #ResilienciaEcosistémica

Nuestro ser se manifiesta en nuestro hacer, desde él nos posicionamos y nos ubicamos no sólo en el tiempo y en el espacio que vivimos y habitamos, sino también en el contexto sociocultural, encontrando un sentido a la existencia y reafirmar las razones que nos impulsan a seguir co-construyendo un proyecto de vida, integrado a un sistema integral, a un ecosistema del cual somos parte.

Los viajes implican descubrir, conocer, comprender, sentir, valorar y disfrutar otros espacios, otros ecosistemas y poder vincularnos con ajenos que dejan de serlo y así ampliar nuestras redes vinculares y fortalecer las ya establecidas, con contactos que implican encuentros, interacción, diálogos, debates, intercambios. Pensamientos, sensaciones, sentimientos, emociones y vivencias se ponen en juego y nos llevan a nuevos aprendizajes. Nunca volvemos iguales de un viaje.

Desde Espacio R comencé un viaje sentido y compartido que me permitió integrar todos esos aspectos personales en aprendizajes valiosos. 


Pude cumplir con una palabra dada, una promesa antigua pero muy importante: llevar libros a España, entregarles a Gema Puig Esteve y a José Luis Rubio Rabal de ADDIMA (Zaragoza) los ejemplares (físicos, en papel) del libro "Resiliencia Comunitaria" que en 2018 compartimos como obra colectiva. Pude también compartir con ellos y con otros reconocidos profesionales, docentes y alumnos una actividad académica muy enriquecedora en la Facultad de Ciencias de la Salud, de la Universidad de Zaragoza. 

Llevar hasta allí el paradigma de la #ResilienciaEcosistémica, el Modelo GIRA de gestión integral de procesos y su aplicación concreta con #Procens como uno de sus casos, y también poder abrir diálogos profundos sobre el #EntretejidoVincularEcosistémico como concepto central de las ocupaciones actuales, fue esencial para encontrar nuevas preguntas, para co-construir ideas para sus posibles respuestas, para conocer saberes y haceres valiosos con los cuales vincularse para seguir aprendiendo.


También fue posible conocer espacios socioculturales, institucionales y organizacionales que esencialmente trabajan en la dimensión trascendental de la humanidad. Esta dimensión es esencial en la promoción y desarrollo de la #Resiliencia. Más allá de discusiones sobre la fe y las religiones, los credos favorecen la cohesión social, son parte esencial del devenir de la historia y constituyen un cimiento esencial en la cultura. Recorrer espacios impregnados por tiempos romanos, musulmanes, cristianos, judíos, todos entretejidos, hacen visibles dichos cimientos. Observar cómo todas las manifestaciones culturales y artísticas, como la arquitectura, escultura, pintura, mosaicos, textiles, etc. son los genes de las identidades actuales que pueden conocerse hoy. 

Así conocer el centro misionero de Verbum Dei, en Loeches, España, y a quienes lo conforman y habitaban en el momento de la visita, permitió confirmar cómo desde el silencio, la meditación, el contacto con la Naturaleza, un espacio puede conformarse como una usina de resiliencia. La dimensión trascendental de la existencia humana requiere ser atendida para que las personas puedan vislumbrar, definir y trabajar sobre el sentido de la vida y su consecuente proyecto que se plasma en acciones concretas. No importa cuál sea la fe o las creencias, precisamos conectarnos con esa dimensión para ser plenamente. La Naturaleza ofrece siempre los escenarios justos para lograrlo. La relación  con ese sostén material del mundo implica siempre el contacto con lo sutil y con lo eterno, satisfaciendo las necesidades humanas de trascender.

De la misma forma, visitar el Centro Municipal de Salud Comunitaria de Arganzuela, Madrid, de la mano de Pilar Surjo de Bunes, fue confirmar el concepto de "Usina de Resiliencia Ecosistémica", ese espacio que gracias a la tarea de verdaderos "facilitadores" de #resilienciaecosistémica, ésta puede manifestarse concretamente, co-desarrollándose para co-transformar la realidad.


 Así, uniendo aprendizajes, trabajo profesional, intercambios esenciales, afectos, vínculos, respeto y amistad, el encuentro personal corona muchos años de trabajo compartido y  de promoción de #resiliencia, como lo realizado en las distintas cohortes del Diplomado de resiliencia de la Universidad de Barcelona, hace varios años. Pilar nos abrió las puertas de su espacio profesional y compartió su importante tarea comunitaria, para observar, analizar y apreciar el funcionamiento de dicha usina en la que el #EntretejidoVincularEcosistémico se hace patente.

Además, el disfrutar días y lugares con familiares y afectos, nos permite también fortalecer esos vínculos, que desde la historia personal y familiar son fuente de sentimientos de pertenencia para resiliar. El compartir con diferentes personas paseos y recorridas, guiados con cariño, pasión, dedicación y un conocimiento consistente de la historia, por las calles de  los distintos lugares, confirmó la idea de que el vínculo con el espacio habitado fortalece la identidad y le permite a las personas ser más plenas y felices. La unión e interacción de los promotores personales y socioculturales de Resiliencia Ecosistémica tantas veces nombrados, definidos y explicados, se hacen visibles y concretas. Todo ser "es plenamente" en contacto directo y con interacción con su contexto, nunca en el aislamiento.  

Por último, llevar a Europa las #tramasytejidosresilientes creados y producidos en Espacio R con hilados naturales y reciclados, fue una satisfacción complementaria: los haceres se unen a los saberes, no sólo estudio, investigo, trabajo y escribo sobre resiliencia, sino que que la promuevo en objetos realizados con sentidos resilientes, de triple impacto y con conciencia, para que la #ResilienciaEcosistémica  no sea sólo un discurso.

Los caminos, los recorridos y las vivencias personales siempre pueden ser la ocasión para reflexionar sobre asuntos más generales, integrarlos y entretejerlos siempre fue la intención de este espacio, por eso los comparto con usted, estimado lector. 




    








09 abril 2023

#Resucitar ?? #Resiliar

Según la Real Academia Española:

Resucitar 

Del lat. tardío resuscitāre, y este del lat. re- 're-' y suscitāre 'levantar', 'avivar'.

1. tr. Devolver la vida a un muerto.

2. tr. coloq. Restablecer, renovar, dar nuevo ser a algo.

3. intr. Dicho de una persona: Volver a la vida.


Según mi día de hoy, es volver y a la vez ir hacia adelante...
Mientra urdo a #Puna, la manta en la que trabajo y vivo, la vida se hace lana natural, de llama, de oveja... con olor y textura a tierra, con tierra y ramitas, con fibras que fueron y son vida, abrigo y protección de seres que nacieron y vivieron lejos, que fueron alimentados y cuidados, esquilados y mirados, cuidados y visto crecer. Sus vidas y las de esas manos que los cuidaron llegan a mi taller. La vida de las otras manos que las hilaron también llegan en oleadas y se tejen con mis propias manos. La vida vuelve siempre.

Hoy resucito, hoy vuelvo a vivir, como todos lo hacemos en todos los instantes sin darnos cuenta. Hoy resucito, como en esa semana santa en la que trabajé en la mesa del comedor de la casa de mi infancia en un trabajo que el Profesor de Plástica nos encargó. Dijo el genial Aldo Severi: aprovechen los cuatro días de Semana Santa y hagan un paisaje en cuatro cuadros, uno al amanecer, otro al mediodía, el tercero al atardecer y el último a la noche. Así entre colores cálidos y fríos, entre celebraciones de la iglesia, entre vía crucis y resurrección... mi trabajo quedó terminado. 

Hoy 43 años después resucitan los recuerdos de esa Semana Santa y de todas las demás. Emociones, reflexiones, vivencias, cambios, oscuridades y luces, enfermedades y curas, muertes y resurrecciones, milagros y desesperanzas, fe y silencio, músicas y pinceles, lanas y agujas... hoy resucito escuchando música en el taller mientras urdo y tramo, siento y canto, recuerdo y sueño. Lanas y témperas, marrones y magentas... paisajes y mantas.


Resucitar es volver a la vida, resiliar es volver a recordar que somos seres en la vida, mientras encontremos el sentido  de serlo. Hacer es volver a ser con sentido. Y las obras nos trascienden, haciendo que el dolor siempre se transforme y nosotros en él y con otros, siempre con otros, como mi Profesor Severi, que resucita hoy en mí, con su tarea que nos encomendó para esa Semana Santa, con su locura creativa, con sus obras, con lo que me transmitió. Aunque no pinte con pinceles, entretejo con lanas y colores, resucitando las pasiones necesarias, para olvidar los vía crucis y creer en la esperanza de la vida. Como uno de sus cuadro vive con nosotros en casa, así las mantas vivirán en otros lugares y tiempos, volviendo a creer en la esperanza del abrigo y el color.



#Resucitar #Resiliar #Hacerconsentido #Trascender #Puna #tramasresilientes



07 marzo 2023

#TramasResilientes. La metáfora del tejido.

 Las tramas y los tejidos pueden ser una metáfora de la #Resiliencia Ecosistémica.

Sólo podemos resiliar con otros, desde nosotros y desde un nosotros. Nuestro Yo, nuestra identidad, se hace sólida y consolidada cuando nos encontramos con un otro, cuando interactuamos con otros... cuando confrontamos, cuando coincidimos, cuando debatimos, cuando pensamos, cuando sentimos, cuando disentimos, cuando nos acercamos o cuando nos alejamos con otros.

Los vínculos nos permiten expresar nuestro ser. Solos, no podemos. Somos un punto en un tejido, unido por un hilo, que se retuerce, que se enlaza y que continúa en cada punto. Cada punto es distinto, está separado del resto, pero no suelto. Cuando se suelta y el hilado se escapa, el tejido pierde fuerza y se deshace. Cuando desde afuera algo corta ese tejido, los puntos se escapan también y todo deja de ser. Si el tejido avanza sin dificultades, los puntos van pasando entre las agujas: son los protagonistas de ese presente, son los hacedores de lo importante y así vuelta tras vuelta, van quedando abajo del tejido. Pero no son menos importantes: son y fueron esenciales.  De esta manera,  el tejido se convierte en la metáfora de la vida y de cómo las redes de vínculos son promotoras de Resiliencia Ecosistémica: permiten co-construir con otros y co-transformar la realidad, que aunque sea compleja y a veces dura, puede ser aceptada y modificada.

El tramar en telar también es otra metáfora de la Resiliencia Ecosistémica. Cada hilo de la urdimbre es indispensable para que el tejido se sostenga con la resistencia justa, el grosor adecuado, el color más conveniente, la tensión necesaria. Cada vuelta de la trama, completará esa urdimbre para que el tejido resulte ser lo esperado. Cada hebra con su color, textura, material, grosor y características propias le dará su toque personal a esa trama, que verdaderamente sonará como un coro: el abanico de las voces hace brillar la melodía que las unen.

Por eso, desde Espacio R Tramas busco, promuevo y me uno a actividades colectivas que sean promotoras de Resiliencia Ecosistémica, que abran espacios de encuentro, de diálogo y de aprendizaje colaborativo, para generar #redesresilientes que nos ayuden a resiliar con otros, dejando de lado el aislamiento, la soledad y el individualismo.

Por eso los invito especialmente... 

Webinar:
Entretejernos y Resiliar.

Una oportunidad para re-encontrarnos, en medio de la vertiginosa y compleja realidad. Para saber más sobre #ResilienciaEcosistémica

Es un gusto desde Espacio R Tramas co-construir #hacerresilientes con
El Pez Volador, educación en autismo

Viernes 10 de marzo de 2023, 19:00 – 20:30 ART
Online (Zoom)

https://www.eventbrite.com.ar/e/entretejernos-y-resiliar-tickets-575043910817?utm-campaign=social&utm-content=attendeeshare&utm-medium=discovery&utm-source=wa&utm-term=listing

Los esperamos.
Se agradece compartir y difundir.

#tramasresilientes #redesresilientes 

#resiliencia #resilienciaaplicada    

26 febrero 2023

Cómo vibrar en RE: Tejer desde la #ResilienciaEcosistémica

 Tejer y tramar no es una actividad más. Ser tejedora o telera no es un oficio más. Implica una actividad compleja, donde se ponen en juego cuerpo, mente y alma. Se toca no sólo con las manos, el cuerpo danza, el alma se extasía y la mente medita. Las percepciones, las sensaciones, las intuiciones, los pensamientos, los sentimientos, las emociones, los valores se entretejen en cada punto, con cada hebra, con cada hilo de la urdimbre o de la trama.

Cuando Espacio R se transformó en Espacio R Tramas, pude conjugar muchos elementos de mi vida: la Resiliencia Ecosistémica, la Agroecología, el Triple impacto y los tejidos. Esta #hacerresiliente me permitió disfrutar de más de tres impactos (social, económico y ambiental), facilitó que todo lo que expresé en el párrafo anterior tomara forma en tramas. En cada una de ellas lo que sé, lo que siento, lo que pienso, lo que sostengo, se entreteje y aparece en un tejido. 

Y por qué unir todo? Porque la coherencia nos ayuda a mejorar. Saber sobre Agroecología, no sólo me trajo más admiración por mi hijo y por las nuevas generaciones que llegan para interrogarnos sobre lo que hicimos y hacemos, sino que me facilitó darle forma a la Resiliencia Ecosistémica y relacionarla con otros conocimientos otorgados por otras fuentes y actividades como el Triple Impacto. Entonces "hacer" era imperioso, "hacer con pasión, placer y compromiso" es urgente. 

Tejer siempre fue una fuente de alegría, una forma de regalar a otros no sólo prendas sino de regalar mis sueños y esperanzas. Pero qué mejor que hacerlo desde el compromiso ambiental y el consumo responsable. Así decidí empezar a tejer con hilados naturales, en lo posible producidos agroecológicamente: lanas naturales, hilados de algodón puros y agroecológicos. Tocar, sentir, ovillar, urdir, tejer y tramar con estos hilados me llevó a sensaciones únicas y nuevas. Y a decidir no volver a atrás. Tejer con hilados sintéticos ya era un placer, pero saber que esa lana provino de un animal alimentado y cuidado por otras personas, que lo vieron nacer y crecer; que otras personas hilaron esa lana, que la tocaron y que pasó infinitas veces por sus dedos y por sus almas, que otras almas las pensaron en colores y que la tiñeron naturalmente con plantas, flores y tallos, que también son expresión de vida... no tiene precio ni valor. Tramar con hilados de algodón que fue producido agroecológicamente por comunidades culturalmente integradas con valores humanos y ambientales, es también invalorable. Tejer con ellos es conectarse con todo eso.

Por eso, si pienso en hilados sintéticos, no quiero ir a comprar nuevos, con el excesivo gasto de recursos naturales que implica su producción. Prefiero re-utilizar y reciclar, no reducir su consumo, sino eliminarlo. Prefiero comprar hilados recuperados y procesados por personas y grupos comprometidos con la realidad. Por qué no deshacer tejidos no usados y volver a revalorizarlos en una bella urdimbre? Así destejiendo, lavando, armando madejas, ovillando esas viejas lanas sintéticas, siento que estoy haciendo algo por el ambiente, por el ecosistema... por nuestro ambiente, nuestro ecosistema. Así concretizo mis valores, conocimientos, sentimientos y deseos en objetos útiles y tangibles.

Así, que después de vivir intensamente todas las etapas del proceso (sueño, diseño y producción) del tejido, veo en esa trama una parte esencial mía y una parte esencial del mundo, me entretejo con él, con sus necesidades y sus urgencias. En cada proyecto hay mucho: desde el bautismo, desde la elección de su nombre hasta su finalización, en cada hilo, en cada pasada, en cada punto hay elementos que pueden presentirse y sentirse: la fuerza de una cordillera, el infinito del mar, la urgencia de un volcán, la calidez del sol, el poder de la nieve y la fertilidad de la pradera. 

Por eso tejo, por eso tejo con hilados naturales y reciclados, por eso creo que cuando tejo, me entretejo con otros y con la naturaleza, con el mundo, con nuestro mundo. Por eso cada manta, cada chalina, cada mantita de bebé, lleva algo más: un nombre, sueños, esperanzas, tiempo, minutos y horas de reflexión y meditaciones, pensamientos, deseos... y un poquito de mi alma, que quiero irse y volar por otros lados y vivir otros destinos, pensando que no todo está perdido.

Por eso las muestro, las cuento y las ofrezco en mi otro blog: 

https://catalogo-espacio-r-tramas.blogspot.com/

Así tejiendo desde la Resiliencia Ecosistémica, vibro en RE. 

https://music.youtube.com/watch?v=tjaz73Bn3WA&list=OLAK5uy_lOHq5uQ5LuQxVAq6RPT0Ky4G_2UuPP_fc     

  Cuerpo y alma (Pedro Aznar)

Alma al aras alas que pasan

Del ave que en vuelo anda

Ama el alma en mantra

Alma del lugar noche y fogata

Hazte luz y el fuego en llama

Llama al alma y canta

Canta y ama vive en cuerpo y alma

Sol de la naturaleza llama

Alma que al tramar tramas en mantras

Haz que el luz aves alas as

Salve al cuerpo y alma

Alma nombre a Dios o al que es amigo

Fiel en sí y a uno mismo

Voz del cuerpo y alma

Pensamiento y ama el alma en mantra

Que en el cuerpo un templo guarda al alma

María Gabriela Simpson

    

15 febrero 2023

Como siempre los "...ismos" matan al #pensamiento crítico.

La Resiliencia Ecosistémica (RE) toma como de la Resiliencia Sociocultural del SXXI la idea de la Re-Evolución: una evolución resiliente es aquella que desde un proceso de interacción dinámica entre las personas y el entorno, logra el Co-desarrollo de promotores personales de resiliencia (PP) y la Co-transformación del contexto desde los promotores socioculturales de resiliencia (PSC). 

Entre los promotores personales de resiliencia, se encuentran: la consciencia corporal, la energía activa, el pensamiento/raciocinio, la plasticidad creativa, la identidad constructiva sólida, la gestión de emociones, la autonomía, la empatía, el humor, las habilidades sociales y talentos, el compromiso, la prospección y la espiritualidad y la búsqueda de sentido. De los cuales el pensamiento crítico, la razón aplicada e independiente, es esencial. 

No puede darse ningún proceso de re-diseño resiliente sin la capacidad para pensar críticamente la realidad, sin poder aprender, entender, razonar, tomar decisiones y formarse una idea de la misma. El pensamiento crítico garantiza la construcción de una identidad sólida, la autonomía, la gestión de emociones y es la base para la promoción de todos los PP. 

De la misma manera es esencial que el contexto sociocultural lo promueva, lo sostenga y lo considere imprescindible. Por eso, para la RE entre los factores socioculturales que generan resiliencia hay que promover: el desarrollo humano integral, espacios socioculturales innovadores, la identidad cultural, la pertenencia, los espacios expresivos, instituciones proactivas, distintos facilitadores de resiliencia, la conciencia colectiva y la solidaridad. En todos ellos, también la razón libre es indispensable, irreemplazable.

Pero, analizando el presente y el pasado de nuestro país, la Argentina, no se lo considera un bien a promover. Es más, de acuerdo a los hechos de la realidad, de hoy y de ayer, muchos trabajan y se esfuerzan para que desaparezca. Las políticas de distintos ámbitos así lo marcan, sobre todo en el área de la educación, en la que los procesos de aprendizaje no están ni estuvieron tratados como corresponde, para que sean los que promuevan resiliencia y pensamiento crítico.

Desde el nacimiento de nuestro país como intento de nación, allá por 1810, los "...ismos" nos empezaron, no sólo a dividir, sino a enfrentar en posiciones antagónicas, opuestas y ajenas a un diálogo productivo entre los que no comparten ideas ni miradas. Nunca se pudo articular con los "otros" en una sólida co-construcción. Los "...istas" de la vereda de enfrente, siempre son la oposición, siempre son el enemigo, siempre son la antítesis. Así es imposible llevar a cabo ninguna cooperación, ni aunar proyectos conjuntos de país o modelos de sociedad a alcanzar como metas colectivas.

Todos los "...istas", de todos los colores, de todas las posiciones, no tienen dentro de sí la vocación de construir colectivamente. Todos, pero todos, los "...istas" hablan con un discurso cerrado, con un relato súper estructurado en el que no habilitan ni el debate, ni el disenso, ni las dudas. Todas sus expresiones están armadas desde una ideologización fanática que deja afuera a aquel que quiera cuestionarlas, considerando como una afrenta la pregunta. Y por supuesto, que no hay "...istas" buenos ni "...istas" malos, todos son militantes de discursos y de ideas vacías que no provienen de una elaboración propia, razonada y elaborada con autonomía y fundamentos sólidos.

Para el poder reinante y los poderes en disputa, los sectoriales, los que ya están consolidados y los que quieren construirse, los "...ismos" son la materia prima de su constitución. Y los "...istas" personajes súper precisos, necesarios para repetir una y otra vez el guión de la puesta en escena, pensada y elaborada por otros, nunca por ellos mismos.

Por eso, los "...ismos" matan al pensamiento crítico, para que ninguno de los poderes pueda ser evaluado, valorizado, criticado y juzgado desde la autonomía de la razón de los demás, quienes siempre es más útil considerar como enemigos. 

Así, los poderes y los poderosos de distintos "...ismos" son funcionales entre sí y en el fondo, se cuidan mutuamente, dejando que los "...istas" luchen y se embarren en lo bajo, sin gozar de ninguno de sus beneficios, sin derechos ni garantías, sólo con la idolatría y la antipatía como banderas.

En el medio, sufrimos y padecemos, los que sí queremos ejercer el pensamiento crítico, co-construir con los que piensan distinto, co-transformar esta realidad, co-elaborar una esperanza optimista... en definitiva, los que queremos Re-Evolucionar con otros, en un NOSOTROS que no sea una masa. 

Hace tres años era así, hoy es así, mañana será así si no nos educamos, sino aprendemos, sino crecemos.

María Gabriela Simpson      

       





07 febrero 2023

Annie Stein: Tapiz.

Tapiz. Annie Stein.

 https://www.youtube.com/watch?v=zdt_utSKWu4

Si supiera coser, bordar, tejer,

entrelazar telas o hebras de distintas texturas

buscaría en lugar de esta hoja, una sábana de algodón.

Lienzo gastado, zurcido, lo teñiría de colores...

algún sector verde fuerte o del color de las casuarinas

otro de un celeste muy pálido, lila mejor

con tintura de flores de jacaranda.

En el centro de ese lienzo deslizaría en verticales 

un pincel cargado de pintura púrpura,

que quede con relieve cada trazo

que chorreen,

sobresalgan de la suave superficie

algunas partes de la tela,  no muchas, sin pintura.

Se podría pensar que son manchas, pero no...

es lo mismo una mancha que una zona a la que el pigmento 

o algo o alguien no llegó.

Hay que tratar con cuidado esos espacios

dejar que se acomoden, sé que a veces los vacíos 

toman forma cuando el alrededor está poblado,

como las medias o algún guante sedoso o áspero,

moldean los abismos que alguna ausencia pudo haber dejado.

En el costado derecho de la tela, filas de botones,

 paralelas y cercanas como puntos suspensivos...

podría ser que alguna fila continuara

más allá del vértice inferior en una

intersección hacia el borde del paño. 

Botones de camisa, de vestido, botones de pasta, de madera, 

de bronce en chaqueta de gala...

también ese color verde turquesa

con un lado despejado que habrá sido de un solero de gross

y botones de saquito de bebé esos que son como pastillas,

serían de color amarillo patito 

para bebés que podrían aún no haber nacido...

rastro del tiempo en que no había ecografías 

y se tejía en blanco o amarillo.

Junto a la fila de botones, un resto de lana 

de la que llaman nube esponjosa y mullida,

para hacer ese ovillo tan pequeño,

hay que tomar la lana y enrollarla en cuatro dedos, 

exceptuando el pulgar de una mano...

si queda una colita de la lana se hace con ella un nudo 

alrededor de lo que parecería una cinta de Moebius 

o un símbolo infinito...

así se guarda con una tarjeta de cartulina indicando cuánto...

15 gramos...

adecuado para recordar que hubo y habrá manos,

esperando hijos, nietos, sobrinos.

Un sin tiempo expansivo y condensado en un resto de lana.

Como quisiera que no fuera necesario en la fila de botones

agregar algunos rotos o partidos.

Sin puente que sirviera para pasar el hilo y sostener

Como quisiera que no fuera necesario

incluir lágrimas colgadas de alfileres de gancho...

sería incompleta si no hubiera  además

alguna formas ovoides como bocas abiertas en un grito.

Hace falta que deje aquí aclarado que a veces gritamos sin un gesto,

o al desnudarnos bajo el agua de una ducha, enmudecidas.

Serían agujeros en el lienzo...

Me gustaría aplicarle plumetí, organza, tul... de trama muy abierta 

o un trozo de cáñamo...

que queden cubiertos, pero traslúcidos.

Alguien habrá seguramente que pueda comprender qué significan los hilados.

Hubo un tiempo en que me hubiera sido necesario señalar que quede claro,

quiénes de mí fueron nacidos.

De algún modo, apartarlos de la fila de botones.

Parecería que ahora no, hoy, es adecuado que allí estén ellos

entre tantos como entre tantas pude encontrarme también yo.

Lo que sí me gustaría es conseguir algún hilo invisible imperceptible,

no un hilo elástico... uno de perfume si lo hubiera

para ser un hilván flojo donde sea.

Podría tener cerca el aroma de la abuela.

Será bueno recordar que el método de enrollado, sirve también para avisar.

Piolines de esos blancos con los que se anudaba la caja de la pizza,

los que no deben faltar en el primer cajón de la cocina,

junto junto alguna hoja de papel madera o blanco

tan útiles para poner el pan rallado

cuando se hacen milanesas 

o dejar caer la harina tamizada en forma de volcán...

o el hilo sisal, ese ya no se usa tanto. 

Pero ojalá quede algo

de cuando el zapatero empaquetaba los zapatos renovados, media suela y taco.

Algún aviso de esos, si los podría colgar

tal vez del margen inferior derecho,

sugerir un lugar al que los botones.

Podrían llegar sobre la mitad izquierda del gran paño,

una a continuación de la otra, cinta al bies, pies cinta de gross, de terciopelo...

seda falletina, cinta hilera o alargada...

algún resto de ese galón, zig zag color azul del delantal cuadriculado...

entredos o broderías...

formarían un laberinto que debe tener al menos una salida.

Podría haber también algún resto de

cinta de máquina de escribir de dos colores negro y rojo,

entremezcladas con las cintas, 

hebras colgando de seda fina, de té azafrán,

tabaco, cabellos de Ángel... 

algunas de madera muy flexible que no se quiebre,

aunque la doble con fuerza...

hebras de yute, cabos de amarre

y por delante sin taparlo, pero de modo de dejar de lado el entramado,

podría extender alguna o varias muselinas.

No haría falta bordar las instrucciones.

Buscar la salida, la buscamos, la busqué...

aún sin darnos cuenta o sin lograrlo.

Podría ser que hubiera en uno o varios corredores de ese laberinto 

telas de araña.

Una tela de araña se crea para atrapar y

que la tejedora sin esfuerzo vacíe, lo atrapado de todo contenido,

hasta que sólo queden cáscaras.

Se vale de una clase de veneno que paraliza la víctima.

Hay muchas telas donde quedar atrapado

o muchos procederes que paralizan con el tiempo o con la lluvia...

la tela pierde sus propiedades adhesivas, 

el tejido queda inservible y puede ser que

gotas de agua queden adheridas a los hilos de seda espiralados...

puede ser que las hebras o los cabos

sean las lianas de las que podamos sujetarnos antes de pegar el salto.

Me detengo en este punto,

veo, veo que hay en esta página un bosquejo de tapiz,

al verlo presiento que sería mejor en lugar de un laberinto,

disponer de más de uno.

Es que a veces encontramos la salida y

la marcha recomienza algunas veces, 

en un lugar menos intrincado...

algunas veces en otro sin respaldo...

sería como un tren de laberintos,

pasaríamos de vagones, 

cambiaría el paisaje alrededor.

Podría ser que recorramos alguno de la mano de un otro,

que al pasar de laberinto, liberamos...

o que no sea de la mano el recorrido, todo lo contrario.

Buscaría bordar hilo de anhelo o de quimera,

esas palabras que se atropellan en mi cara

arbitrariedad, envidia, exceso,

aprovecharse, maltrato...

Como una ola inagotable están, 

a pesar de que quisiera que se acaben.

De lado a lado atravesaría este tapiz imaginario,

con el galón bordado,

aguardaría el estrépito sonoro del derrumbe de tantos laberintos ocupados,

con tanto, tantas, tantos, que quedan atrapados,

que más que hacer que intentar tenderles una mano.

Por eso en el tapiz habría golondrinas,

lo encuentro necesario.

Aunque sea esa vez,

lo máximo que he logrado en el dibujo de pájaros...

una bandada ondulante en el vértice superior derecho...

algunas volarían por fuera de la de la otra,

sembrarían en ese cielo verde la cadencia de su canto,

el color verde de la tela está por allí arriba.

Podrían nutrirse entre los pliegues con perfume de los cipreses en otoño,

espuma del océano, cenizas o rumor de arroyos y aire seco

dejarían sus huellas aperladas en la arena.

En el exacto centro sobre las pinceladas rojas, 

quisiera disponer varios círculos concéntricos 

de botones blancos y antiguos, 

los podría coser con hilo de color azul...

 usaría las seis hebras 

y aún no me decido si punto cadeneta o punto tallo.

El bordado sería como rulos, 

podría enroscarse al laberinto, 

abrazaría aves, agujeros...

podría servir también de puente entre

las telas de araña y los pájaros.

Me gustaría que el lienzo en su contorno tuviera ojales,

buscaría lanas lana rosa de angora, lana cobre oscuro, beige, roja,

verde, azul eléctrico, de oveja, de llama teñida y de colores naturales,

hasta de cachemir de vicuña, si es que encuentro,

bien hiladas...

algunas, otras que parezcan vellones recién esquilados,

serían esferas perfectas,

parecerían bolas de nieve o adornos navideños,

Para hacer esos ovillos hace falta

contar con dos manos extendidas en el aire paralelas,

si esto no fuera posible se puede hacer,

con el respaldo de dos sillas...

no... ninguna silla puede reemplazar dos brazos extendidos...

Haría un hueco en el suelo y lo dejaría allí un par de meses,

que la tierra se ocupe de cambiar los colores,

que conforme otras trazas, 

deje su huella dibujada... lo transforme, lo envejezca.

Recién pasado el tiempo, con el lienzo bajo el brazo y las lanas,

caminaría por la sierra, extendería el lienzo entre espinillos,

encendería abanicos en las ramas,

aún en la quietud que ondule...

aprovecharía el instante para aplicar un bolsillo de fuelle,

dejar caer dentro un libro de poemas,

semillas de olmo, empanaditas bordadas de seda

dijo alguien una vez al escuchar que las nombré, de hojaldre.

No guardaría un Cóndor, solo su vuelo 

y el brillo de la mica. 

El extremo de alguno de los ovillos lo pasaría por los ojales del tapiz 

y desde allí que el resto de lana cuelgue...

no todas las lanas por los mismos ojales,

ni todos los ojales con las mismas lanas.

Es el modo que encuentro en mi ignorancia 

para dar una idea de sin límite,

crearía espirales, quedarían entrecruzadas...

tal vez el viento o el transcurso de los días 

los irán desovillando...

recién en ese momento decidiría si vuelvo a hacer ovillos 

con las lanas o si las dejo así desenrolladas...

De distintas direcciones llegarían mujeres completamente nuevas vestidas

con una malla del color de la piel, 

vistas desde lejos parecerían desnudas...

18, 30, 45, 53, 71... no importa cuántas, 

no importa las edades...

sería una invitación a algún remanso,

replegar el tiempo, hacerlo uno indivisible, amado...

enroscarse en alambre, indagar en espejos.

Atolondrada alguna, podría confundirse o

buscar envuelta en los alambres, agarrotada, entumecida,

con sellos en la mano bajo la lluvia,

antes esconderse, separarse, juntarse... 

si hubiera barro podrían patinar, 

se cubrirían con tela, la extenderían, 

en alguna detención, podrían contemplarla,

con lo que encuentren, jugar...

alguna podría llevar entre sus manos mariposas y una luciérnaga de tul,

después de danzar hasta cansarse, 

se dejarían envolver por los reflejos, las luces y las sombras,

como un fruto partido en dos mitades, una cáscara en desuso...

quedarían los restos del alambre en un costado. 

Entonces lo llenaría de lana, con nudos, primigenia.

Si ya hubiera llegado a los 70 para el momento de extender este tapiz, 

él estaría cerca...

hay unos hilos que sostienen mi quehacer con su mirada.

Aunque cerca en ese tiempo fuera muchos kilómetros de distancia

estaría aprendiendo me parece, cómo es vivir de esa manera...

entre los dos, podríamos colocarlo desde el centro, 

me gustaría deslizarnos por debajo, la luz reverbera en los botones

en un escenario que podría ser cualquiera...

confundirnos con el sonido de los chelos,

permanecer, verter el aroma del bordado en la raíz del espinillo,

en el aire quedaría trémolo, el perfume del tapiz.

(Transcripción personal)

https://www.youtube.com/watch?v=zdt_utSKWu4

06 febrero 2023

#AlgodónAgroecológico #ProducciónResiliente #ConsumoResponsable

 El #Tripleimpacto propone pensar en todos los aspectos que una acción humana implica, sobre todo las realizadas por las organizaciones, instituciones, empresas, emprendedores. Sintetizando, los impactos pueden englobarse en tres: económico/financiero, social/cultural y ambiental. En definitiva, todos nuestros haceres impactarán en ellos. Pero cuando se realizan actividades económicas y productivas, es urgente y necesario tomarlas en cuenta: la realidad que vivimos lo hace imprescindible. Después de tanto tiempo de tanto hacer pensando sólo en los aspectos materiales hacia beneficios sólo económicos, llegamos hasta aquí, con serias dificultades sistémicas que no podemos negar. 

No se trata de no buscar beneficios financieros se trata de que no se puede alcanzarlos más descuidando las consecuencias. Observar, medir, regular y modificar los efectos en todos los ámbitos, nos hará más mejores... a todos, en todas las dimensiones. Por eso, las nuevas economías que desde distintas ideologías, miradas, posicionamientos y puntos de vista, nos invitan a modificar nuestras conductas humanas,  productivas y consumistas: la Economía del Bien Común, la Economía Circular, la Economía Azul, La Economía social y Solidaria, las Empresas B, etc. La Resiliencia Ecosistémica considera esencialmente a esta necesidad de replantear la producción y el consumo desde estas renovadas posturas, que son más que posturas, son valores en acción. 

Por eso desde Espacio R Tramas, se pone tanto énfasis en los insumos utilizados al entretejer, para que desde nuestras tramas se propicie un consumo responsable, valorizando los materiales utilizados y revalorizando el trabajo que lleva producirlos y utilizarlos como insumos. No tejemos con cualquier hilado comprado en cualquier comercio. Reciclamos lanas acrílicas tejidas anteriormente en otras prendas que no se usan más para no volver a comprar hilados nuevos que en su fabricación implique el uso de petróleo y otros elementos que eleven la huella de carbono y el sobre uso de recursos naturales escasos o no renovables.   

Por eso buscamos hilados naturales y producidos agroecológicamente... y los encontramos. Entre ellos compramos y recibimos el algodón NO¨OXONEC - ALGODÓN DE FRONTERA

"En la Provincia del Chaco, desde el año 2017 un grupo de familias Qom de Pampa del Indio y Pcia. Roca, incorporaron a sus chacras la siembra de algodón, sin uso de agrotóxicos; allí nace la experiencia "NO¨OXONEC-ALGODÓN DE FRONTERA" con el objetivo de producir en forma amigable con el ambiente, fomentar la agroecología y lograr que el agregado de valor sea 100% chaqueño." https://nooxonecalgodondefrontera.blogspot.com/

"Desde Campo Alto, El Asustado, pasando por Pampa del Indio hasta La Leonesa y Las Palmas, iniciando la 6ta. campaña consecutiva de producción de algodón y alimentos en sistemas agroecológicos, de la mano de la Asociación de Pequeños Productores del Chaco (APPCh) y la Fundación Carrillo, varias familias agrupadas en organizaciones sociales locales o en forma individual o comunitaria continúan defendiendo la tierra, nutriendo los suelos, multiplicando y preservando las semillas, en cada campaña."       https://www.instagram.com/reddesaludchaco/


Así se siembra y se cosecha con una postura comprometida y consecuente con el ambiente, entrecruzando desarrollo humano integral, agroecología y cultura... se entretejen lazos para producir hilados, telas y prendas pero también arte:

""El salvaje e irreverente algodón Agroecológico" "NO¨OXONEC -ALGODÓN DE FRONTERA"se mezcló con @diego_gon.tierra_quemada y de las manos de Diego nacieron estas bellísimas piezas de cerámica. ✨”Es un pequeño tributo a nuestro algodón “ ✨fueron sus palabras. Las piezas las presentó en @feriapurodiseno. Es una alegría inmensa para nosotros compartir estos lazos que crea la cultura agroecológica 🌾 Toda la experiencia No”oxonec es gestionada y llevada adelante por @reddesaludchaco 🌾Si quieres colaborar podes difundir la experiencia y/o adquirir los HILOS y CINTA del algodón producido de forma agroecológica . Agradecemos tu apoyo". https://www.instagram.com/p/CkrNrPYM3zJ/


"🌾El es Jorge Esteban, agricultor. Estás fotos las tome en uno de los primeros viajes donde acompañe a @reddesaludchaco a las charcas donde se cultiva el algodón agroecológicos con base campesina . Esteban trabaja la tierra junto a su familia. Primero recuperando los suelos , con una mirada ecosistémica. Para poder plantar además del algodón, verduras , hortalizas y frutales que serán parte de su alimento. 🌾La Agroecologia nos brinda un dialogo de saberes donde se fortalecen los procesos participativos de la gente productora. Da sentido de pertenencia.🌾Estoy aprendiendo a ver la agricultura agroecológica cómo una cultura (no solo una forma de producción). 🌾La cultura se construye en articulación y en diálogo con otros. 🌾Entendiendo que la alimentación no es un producto comercial , es un derecho. 🌾Donde la naturaleza forma partes de enteros relacionados . Poder salirme del pensamiento lineal para respetar los procesos. 🌾En ese primer viaje no imaginaba toda la vida latente, salvaje y hermosa en la que iba a sumergirme. Creo que fuimos hechos del polvo y toda esta experiencia me conecta con mi esencia misma ✨🙏 🌾Experiencia No”Oxonec Algodón de frontera." Mariana Acevedo. https://www.instagram.com/mariana.acevedo/




Por todo esto que expresan estos textos, sus actores y sus protagonistas y porque la #ResilienciaEcosistémica implica a la #Agroecología, al #TripleImpacto y al #ConsumoResponsable... creemos en la #resiliencia... creo en la #resiliencia, creo de creer y creo de crear.

 


27 enero 2023

Ayer: Imágenes y frases resilientes para resiliar. Hoy: balances y agradecimientos #EspacioR

Esta imagen y esta frase fue publicada el 20/2/14... 
Fue la entrada más visitada del blog, de este blog que quise crear en enero del 2009.

Desde hace catorce años que voy desarrollando este espacio...
... lo voy escribiendo en función de lo que hago...
... lo voy rediseñando de acuerdo a cómo cambio yo y cómo cambia mi hacer...
... lo pinto con el color de mis sueños y mis realidades...
... le cambio el nombre, lo bautizo, lo unjo con aromas, lo bendigo y lo empujo a volar...
... lo alimento, lo nutro... me alimenta y me nutre...
... lo entretejo con mis saberes y haceres...
... lo convierto en un puente, en un camino, en una ventana...

Su esencia es la #resiliencia.
Pasó por la #resilienciaenelaula    la #resilienciasociocultural     la #resilienciaaplicada     y ahora 

la #resilienciaecosistémica

Hoy tejo y nos entretejemos en #tramasresilientes con hilados y con vínculos, tejo y sigo desarrollando proyectos de investigación, consultoría y formación. Entretejemos #redesresilientes

Las otras entradas más visitadas de Espacio R,  de éste mi espacio fueron: 

https://espacio-r-tramas.blogspot.com/2010/06/ser-maestro-ser-maestro-resiliente.html

https://espacio-r-tramas.blogspot.com/2009/05/casos-r-cuando-la-edad-es-fuente-de.html

https://espacio-r-tramas.blogspot.com/2009/12/casos-r-rita-levi-montalcini-mujer.html?sc=1674829492210#c8352920434009760988


Ésta fue una de las primeras publicaciones, que hoy me parece el homenaje adecuado a los maestros que tuve y que sigo teniendo, porque me siguen enseñando. Especialmente a la Dra. Mabel Munist, quien con el correr del tiempo fue y es uno de los afectos esenciales en mi vida:

https://espacio-r-tramas.blogspot.com/2009/06/cier-usina-de-resiliencia-sociocultural.html


Buceen en Espacio R, busquen lo que les interesa, interactúen, dialoguen en él y con él. 
Co-construyánlo, leyéndolo y disfrutándolo tanto como yo. 


20 enero 2023

#Impactoambiental = #impactoantrópico ... #resilienciaambiental + #resiliencia = #ResilienciaEcosistémica

 Todo lo ambiental, todos los temas relacionados con problemas ambientales, parece que han estallado y están presentes en nuestra vida, en los medios, en las redes, en las conversaciones... Desde el cambio climático a nivel macro, hasta aspectos personales y domésticos como refrigerar los ambientes, pasando por la sequía, el uso de la energía, incendios, falta de agua, tormentas, inundaciones... y todo tipo de catástrofes invaden nuestra realidad y nuestras vidas, en todos los puntos del planeta, sobre todo después de la pandemia del Covid.

Militantes ambientalistas, especialistas en Ecología y en Agroecología, organizaciones no gubernamentales y de la sociedad civil, desde hace mucho tiempo, manifiestan sus investigaciones, opiniones y posturas. Los jóvenes han tomado una posición fuerte en esas cuestiones, empujando a las comunidades a mirar y cambiar. Los gobiernos, los partidos verdes y los poderes económicos, han hecho poco y nada: sólo formularon declaraciones formales, documentos y compromisos, algunas luchas y debates... pero resulta muy mínimo. En ciertos países, como en Chile por ejemplo, la temática ambiental logró un espacio muy importante en el debate por la reforma constitucional.       

Por eso, resulta urgente pensar en el #impactoambiental que han tenido las acciones humanas, o sea pensar en el  #impactoantrópico, en esas consecuencias que tuvo y que tiene, lo que la humanidad hace en el mundo y en el universo. Es el tiempo de pensar críticamente, de estudiar dichas consecuencias y ponerse en acción, no ya para proteger recursos naturales, sino para regenerarlos. Es imprescindible hacer para volver a generar lo que se ha destruido. 

Por lo tanto, todas las tendencias que han aparecido resultan tan valiosas: el turismo regenerativo, el consumo responsable, el compromiso ambiental, las nuevas economías (del Bien Común, Circular, Azul, Triple Impacto, Social y Solidaria). Pero es fundamental que no sean cuestiones de moda ni transitorias: deben instituirse e instituir, para provocar los cambios sociales y culturales necesarios para poder enfrentar y co-transformar la realidad.

Ya desde hace tiempo, la Psicología Ambiental vino estudiando los impactos psicológicos que tiene nuestra relación con el ambiente y con las consecuencias con lo que hacemos con él. La Antozoología por su parte nos brinda también saberes sobre cómo es nuestra relación con los animales, quienes son fieles representantes de la Naturaleza. 

El constructo de la #resiliencia fue evolucionando y abriendo un abanico interesante de miradas: personal, familiar, grupal, organizacional, comunitaria, política, sociocultural, política y ambiental. Hoy es vital utilizar el paradigma de la #ResilienciaEcosistémica para poder co-construir estrategias, tácticas y acciones obligatorias para poder co-transformar nuestro mundo en un lugar habitable para todos los seres vivos y así podamos evolucionar resilientemente: Re-Evolucionar.

Esto implicará fuertes cambios de pensamientos, posturas, valores y consumos, por lo que la mirada crítica, la cultura colaborativa, la consciencia y los compromisos colectivos son forzosamente esenciales. La tarea de todas las instituciones sociales es insoslayable, desde la familia hasta los gobiernos, pasando por las escuelas y las organizaciones, pero antes es urgente su reconstrucción desde el poder, para que desde él, se empoderen para así instituir democrática y respetuosamente, teniendo en cuenta todas las diversidades. Los seres humanos deben reconocer sus potenciales y sus potestades, para ejercerlas con responsabilidad, implicándose en los cambios y demostrando con conductas estables los mismos. Para ello es obligatoria la capacidad para interactuar, construir y hacer con otros, estableciendo vínculos positivos y duraderos, desarrollando las intersubjetividades desde el respeto y la empatía... para crear "propatía".

Todavía me dura el impacto de la película "El día después de mañana" y, al ver los noticieros, creo que son su nueva versión, con la terrible tristeza que no son hechos ficticios, sino reales y actuales. Por lo tanto, se me impone la idea de que debemos  pensar en "El día después de ayer".

Para eso, para hacer resilientemente desde los "microlugares" propongo y desarrollo Espacio R. Por eso y para eso tejo con lanas e hilados naturales, reciclo los que tienen acrílico en nuevos tejidos, diseño y produzco #tramasresilientes y propongo consumos responsables desde un lugar donde los saberes se unen con los haceres conscientemente. La #Agroecología, el #Tripleimpacto, el #Artetextil, la #tejeduría y la #telería se suman a la #ResilienciaEcosistémica.

Los invito a entrar en él, a pensar juntos, a hacer juntos, a aprender y cambiar juntos... para poder co-transformarnos y co-construir una realidad mejor. Creo que es posible, que nos hará bien y mejores.

María Gabriela Simpson